Día 9. De Udaipur a Pushkar.

Check out y marchamos hacia Pushkar, unos 300 kilómetros , vamos, que llegaremos después de comer teniendo en cuenta que salimos a las 8.30 de la mañana.

El camino siempre es interesante. Hay gente por todos los lados, incluso en los sitios más inhóspitos. Búfalos, vacas, ovejas, pavos reales, mangostas y cualquier tipo de bicho cruzando la carretera...vehículos de todo tipo...camiones cargados hasta los topes de miles de cosas...familias enteras viajando en moto...y hasta cabras en moto!!!

 

Después de un camino agotador llegamos a Pushkar y Shiva va en busca de nuestro hotel, que como es relativamente reciente aún no lo conoce. Es nuestro "caprichito" de la luna de miel. Un resort de lujo situado a las afueras de Pushkar, el Greenhouse Pushkar Una auténtica maravilla. Superó nuestras expectativas. Un lugar ideal para alejarse del ruido y descansar un poco. 

 La tienda una preciosidad, y el baño ...joé, ya me gustaría tener uno así a mí en casa.. Así que con lo tarde que era, decidimos pasar la tarde en la piscina, a remojito, a ver si nos quitamos el calor del cuerpo, porque con las duchas es imposible.

 Quien viaje a India en época de mucho calor, que sepa que no va a poder refrescarse pegandose una ducha fría noooooooooooo. Los bidones de agua suelen estar en las azoteas de los edificios, y os aseguro que a veces es imposible saber cuál es el grifo del agua fría y cuál la caliente. A veces incluso la fría estaba a mucha más temperatura que la caliente. Hervía.Era imposible ducharse así. Así que pillamos el "truco" de que cuando llegabamos a los hoteles llenabamos los cubos que tenían en las duchas con agua y la dejabamos "enfriarse". Tengo entendido que en época fría el problema suele ser justo el contrario jeje, así es India!!!

 

 Mañana más!!!!